Hace 15 años, en junio del 2008, se logró el sueño de una gran parte de las personas que, en ese momento, trabajaban en la Bolsa Mexicana de Valores, los cuales, un número importante lo siguen haciendo y han sido testigos fieles de la transformación de una empresa cuando ingresa como emisora al mercado de valores. Aquel viernes 13 de junio del 2008, se llevó a cabo la Oferta Pública Inicial (OPI) de acciones de BOLSAA.MX dando una vertiginosa evolución de nuestra empresa al paso de los años.
Este logro se comenzó a consolidar el 31 de enero del 2008 cuando se celebró una Asamblea General Ordinaria y Extraordinaria de Accionistas, mismos que continuaban en el tema desde agosto del 2007 para aprovechar las nuevas oportunidades que brindaban las reformas a Ley del Mercado de Valores en México, donde las Bolsas se pudieran convertir en emisoras públicas mediante la colocación de acciones de su capital social. En 2008, entre otras cosas, los accionistas aprobaron que se llevara a cabo la Oferta Global de las Acciones “serie A”, así como todas aquellas reformas necesarias a los estatutos sociales de la Bolsa Mexicana de Valores para darle creación a ciertos comités de administración y facultades adicionales al Consejo de Administración, mismas que garantizarán la permanencia en el tiempo gracias a su alta institucionalización.
Los pasos subsecuentes como cualquier otra emisora fueron:
- Ponerse en contacto con intermediarios financieros como fueron: Casa de Bolsa BBVA Bancomer y UBS Casa de Bolsa para lo concerniente, tanto para el mercado local como a nivel internacional.
- Los intermediarios financieros analizaron el proyecto y el prospecto de colocación, y vieron la viabilidad de la operación a nivel mundial.
En su momento, fue la oferta accionaria más diversificada del mercado de valores mexicano ya que se colocó entre 13 mil 700 inversionistas y 100 fondos institucionales de nivel internacional.

Las OPI’s las llevan a cabo las empresas que buscan expandirse. Es una manera que tienen las empresas de obtener recursos del mercado de valores, sin endeudarse, a través de la venta de porciones de la misma compañía por medio de acciones, las cuales, son negociadas en el mercado y que quedan bajo el escrutinio público en cada momento siendo sensibles a aquellas afectaciones positivas o no del entorno por el cual se transite, desde el punto de vista económico, social, político y como se comprende la gestión de la compañía, ahora con la entrega periódica de información contenida en sus estados financieros que sirve para que los inversionistas analicen las decisiones de compra o venta del instrumento en sus respectivos portafolios de inversión.
Uno de los motivos importantes de la Oferta Pública fue el llevar la mayor cantidad de títulos accionarios de la Bolsa a los inversionistas en el mercado, situación un poco contraria a todas las demás IPO´s, donde la mayoría de los derechos y títulos quedan a cargo de un grupo de pocas familias. Con ello, se fortaleció el alto grado de supervisión que ya de por si tienen las Bolsas por parte de las autoridades reguladoras, con un nuevo elemento que era la opinión del público inversionista en la compra o venta de este título en el mercado.
En la actualidad, queda totalmente evidenciado que el estar listado provoca un acercamiento más estrecho con la sociedad, no solo por las innumerables iniciativas sostenibles con las hoy cuenta la empresa, sino, además el ser una empresa totalmente transparente para los inversionistas y para aquellos que aún no lo son; ellos pueden obtener información acerca del desempeño de la empresa y del actuar corporativo en el momento que lo deseen.
En la antesala de una de las peores crisis financieras del mundo, el Grupo Bolsa Mexicana de Valores (BOLSAA) debutó en el mercado accionario local. La empresa se colocó en 27 veces utilidades, entre inversionistas, individuales e institucionales calificados “AAA” y de distintas partes del mundo. Cada acción se vendió en $16.50 pesos, justo en el rango medio del objetivo de colocación que era entre $14 a $19 pesos. En la actualidad, la acción cotiza en promedio arriba de los $40.00 pesos por título, pero ha alcanzado a lo largo de estos años cotizaciones por niveles arriba de los $50 pesos por título, es decir, un rendimiento promedio alrededor de los 180% en el mercado.

La situación de la acción de Bolsa es considerada como un vehículo de protección para los inversionistas debido a su diversificación de servicios y el trabajo constante de todos los colaboradores que están en ella para hacerla una empresa altamente eficiente en donde los trabajadores son el principal activo de la compañía, que en cada momento piensan en como “Maximizar la riqueza del accionista”.
Con la venta accionaria se obtuvieron, $4,600 millones de pesos o 440 millones de dólares, a un tipo de cambio de $10.40 pesos por dólar de ese momento, capital fresco que fue utilizado para conformar un grupo de empresas con servicios específicos como el listado de valores, operación, compensación, liquidación, proveeduría de precios y venta de información en gran cantidad, todos ellas dedicadas a darle un desarrollo notable al Mercado de Valores y de Derivados en México.
El conjunto de estas empresas dio como resultado un corporativo bursátil sólido, con mayor capacidad operativa y una presencia internacional a la altura de las entidades más renombradas en el mundo financiero.
Dicha consolidación ha generado un grupo financiero que en el 2008 generaba ingresos por $1,400 millones de pesos, a una empresa consolidada que ha crecido en términos de ingresos casi 3 veces más en tan solo 15 años.

Justo en su aniversario número 15, su perspectiva sigue siendo de evolución y fortalecimiento financiero debido a las perspectivas de crecimiento de nuestro país, donde sin duda el Grupo BMV ha sido, es y seguirá siendo, un motor económico para la sociedad que confía en los servicios de alta calidad y que seguirá ofreciendo un acompañamiento a sus diversos clientes y adecuándose a nuevas necesidades que los participantes del mercado vayan teniendo.
Feliz aniversario Bolsa, por estos 15 años de institucionalización que significan un arduo trabajo y responsabilidad de cada uno de sus integrantes pero que garantizan su trascendencia en el tiempo para seguir fortaleciendo la economía en México.
Por: Gerardo Aparicio, Director de Cultura Financiera