Ahorrar dinero no es una tarea fácil, sobre todo cuando hay deudas que pagar o tienes en mente algo que comprar, para lo cual, no tienes un recurso destinado. Pero si se quiere llegar a tener un “guardadito”, algún objetivo económico o simplemente finanzas sanas es indispensable generar el hábito del ahorro.
Según datos de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2021, en México la población que no ahorra aumentó un 31%, siendo las mujeres, en su mayoría, las que menos dinero destinan a esta finalidad. Está es una cifra preocupante, debido a que es posible que las deudas estén sobrepasando sus ingresos y es recomendable poner atención a sus finanzas, pero ¿por qué es importante ahorrar?

Ahorrar tiene múltiples beneficios, entre ellos, alcanzar objetivos a corto, mediano y largo plazo, teniendo como consecuencia un estado financiero saludable libre de deudas. Una vez logrados los objetivos de ahorro, invertir y lograr crecer tu patrimonio se vuelve un paso natural a seguir.
No es difícil lograrlo si te propones metas pequeñas, día a día o practicándolo de una manera que te guste podrás dominar el arte del ahorro.

Y ¿Cómo hacer del ahorro un hábito?
En el blog Hablemos de Bolsa, te compartimos algunos consejos para que inicies:
- Plantea objetivos financieros.
Tomate un tiempo para pensar en lo que quieres conseguir. Se recomienda que sean medibles, alcanzables, específicos, relevantes y reales. Con esto, arma un plan, definiendo un plazo y hacienda un control del progreso.
- Gasta menos que tus ingresos:
A veces, puede ser difícil limitar gastos y se vuelve un problema cuando ya sobrepasó el ingreso que tienes, ya que se pierde el control las deudas empiezan a aparecer y asfixiarte. Para evitarlo, es importante hacer un presupuesto que te permita llevar un control, no endeudarte y perder todo en un abrir y cerrar de ojos.
Una buena forma de empezar a hacer un presupuesto es creando una lista de gastos y deducirlos en ingresos totales. La ventaja de contar con un recurso ahorrado es que puedes planear y reflexionar por cada decisión de compra así como detectar gastos innecesarios.
- Separa un monto y guárdalo
Se puede ahorrar cada día, semana o mes, ni siquiera con grandes cantidades, puede ser desde una cuenta bancaria o comenzar hasta con una alcancía que llenes poco a poco (para luego usar algún método formal que te genere un rendimientro extra o algún beneficio que te de alguna institución financiera). Hay que tomar en cuenta que también se nos puede olvidar, por lo que, automatizar los ahorros haciendo una transferencia por domiciliación bancaria desde tu cuenta corriente a tu cuenta de ahorros puede funcionar, de forma que no tengas que pensar en ello.
- Pensar a largo plazo
Cuando llegue el punto en que tus finanzas estén en forma, te recomendamos empezar a pensar a largo plazo con distintas acciones cómo abrir una cuenta de ahorro o invertir en la bolsa de valores con la posibilidad de tener mayor rendimiento. A largo plazo, la inversión puede ser rentable. Cuanto más tiempo permanezca invertido, más probabilidades tendrás de obtener ganancias.
Lo más probable es que no te salga todo «bien» o sea fácil habituarte cuando empieces a cambiar tu forma de gastar, y eso está bien. Sin embargo, al vigilar tus finanzas, es más probable que detectes lo que te impide alcanzar tus objetivos de ahorro y formar mejores hábitos de compra. Entonces, una vez que sepas dónde es necesario mejorar, podrás ajustar tu estrategia y encontrar mejores formas de cuidar tu salud financiera.
No hay una sola manera de ahorrar dinero y lo que funciona para otros no tiene por qué funcionarte a ti. Hacer un seguimiento de tus finanzas puede ayudarte a mantener el control de tus gastos y a diseñar una estrategia realista, basada en tus circunstancias y objetivos personales.